Las ciencias atmosféricas estudian las leyes y procesos fisicoquímicos que explican los fenómenos atmosféricos relacionados con el tiempo y el clima, tales como tormentas, granizadas, huracanes, tornados, ventiscas y sequías, así como su aplicación al estudio de sus efectos, a corto y largo plazo, en la agricultura, las comunicaciones, el manejo sustentable de recursos, la salud pública y la salvaguarda de la integridad física de la población y el territorio, entre otros.

México tiene un rezago muy grande en especialistas en ciencias atmosféricas capaces de realizar la investigación meteorológica básica y aplicada que se requiere para abordar problemas de interés nacional y estatal, con carácter público y privado, donde la dinámica de la atmófera tiene un impacto directo. Ejemplo de ellos son

• La protección civil ante desastres provocados por fenómenos hidrometeorológicos, como inundaciones, tomentas severas o huracanes
• Agricultura, ganadería y seguridad nacional alimentaria ante sequías
• Ecología, cambio climático, ordenamiento territorial y administración sustentable de recursos
• Comunicaciones aéreas, marítimas y terrestres
• Ubicación, diseño y construcción y generación de energía por medio de fuentes renovables
• Seguridad hídrica